miércoles, 8 de octubre de 2014

Niños o adultos

Nunca sé que terminar de opinar cuando un adulto educa a su hijo como un adulto, si es bueno que tengan sus responsabilidades pero ¿hasta que punto? Los niños, por mucho que queramos que sean autónomos siguen siendo niños. Soy el primer partidario de la autonomía de los niños, que no haya sobreprotección, que sucede más a menudo de lo que nos creemos, pero también hay niños que son tratados como adultos.

Cuando veo a niños en anuncios, simulando ser mayores, posando, desfilando, imitando a adultos con todo lo que trae consigo me da pena, aviso a los padres esos niños son NIÑOS. No son adultos, por tanto si les enseñamos desde pequeños que está bien comportarse como un adulto, ¿para cuando le dejamos el tiempo de la niñez?

La niñez es esa época en que los niños solo tienen una responsabilidad que es la de aprender, no aprobar, sino aprender el máximo posible. Nos hemos vuelto una sociedad resultadista, que en lo único que pensamos es que importa el resultado. En el caso de los niños es aprobar, ni siquiera que aprendan, que creo que es un objetivo mayor (en mi perspectiva) pero en la actualidad no. Se les enseña a tragar de memoria rollos y sin procesarlos, sin interiorizarlos soltarlos en un folio. No les enseñamos a pensar, solo a deglutir folios y más folios. 


Por otro lado tenemos muchos niños que tienen un trabajo, que a mi parecer es malo, es algo que daña a la persona. Hace que ese niño pierda experiencias de su infancia, le piden una serie de resultados una serie de objetivos que no se corresponden con su edad y en muchos casos le fastidian la vida, ya que no llega a ser una persona responsable y hacen que madure a través de instruirle en el resultadismo.

Otro tipo de esclavitud infantil es la que sufren los niños en el caso de meterse en deportes semiprofesionales, pasa de tener un fin lúdico a tener un fin contrario, lo único que importa es ganar y mejorar. No es malo competir, lo malo es perder el objetivo y no es ganar, al menos para mi. Y en muchos casos los padres (suelen ser masculinos) le exigen y presionan al hijo para lograr competir más y mejor. El problema es que encima no le apoyan psicológicamente y cuando falla le presionan y machacan. 

Cuidemos de que los niños sean niños, de que disfruten de su infancia.


Un saludo

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