A menudo se habla del tacto como un sentido, siento decir que no es sólo eso. Que es algo referido a la educación. Cuando hablas de tener tacto en las cosas que se dicen a los niños, te dicen que tu no eres su padre. Efectivamente no lo soy, si lo fuera a la hora de hablar con ellos hablaría, no chillaría. Para mi es algo con lo que no puedo, ver cómo un padre grita a un hijo para tener más fuerza, para atemorizar, amedrentar a ese niño.
Poner normas no significa chillar, no significa agredir verbalmente a quien más quieres del mundo. Poner normas significa razonar, que sean ciertas y razonadas. a veces nos cuesta mucho pensar que en el momento en el que gritamos perdemos la razón, perdemos los modales y hacemos que esa persona se violente con nosotros.
El tacto es una forma de educar, tener tacto con los que viven junto a nosotros significa que esas personas puedan hablar, que nos puedan decir las cosas, que tengamos tacto con sus sentimientos. Parece una tontería, siempre pensamos que educamos lo mejor que sabemos, si, es cierto, pero a veces la autocrítica no es nuestro fuerte. Tengamos tacto, busquemos el contacto con las personas. Podemos decir las cosas de muchas formas, pero si hablamos con violencia, ¿qué respuesta esperamos? ¿Esperamos que nos respondan con amabilidad? No creo, si hablamos de forma violenta la respuesta esperada es la que recibimos, violencia. aunque nos dé mucha rabia es la respuesta esperada y la obtenida. Luego viene quejarnos por tenerla, porque a lo largo nuestros hijos, nuestros compañeros de vida nos responden con violencia.
He tardado mucho tiempo, toda la vida en darme cuenta de esto y aún fallo, pero también busco una autocrítica y recibo la crítica, trato de ser más yo, menos violento, menos defensivo, aunque a veces cuesta pero se puede lograr.
El tacto por tanto es un sentido Si, pero también es parte de un sentido común que nos dice que tratemos a los otros sin violencia, que tratemos a los demás con amor. Que podamos tocar a alguien y a veces saber que un abrazo expresa más de lo que pensamos.
Que nuestros niños buscan el consuelo de un mundo difícil en nosotros, hagamos que el mundo cruel desaparezca para ellos y facilitemos en vez de dañarles nosotros.
Un saludo
No hay comentarios:
Publicar un comentario